Un año después de aquel imborrable 29 de octubre de 2024, la sociedad provincial ha vuelto a reunirse en torno a Letur con el objetivo de recordar, reconocer y agradecer.
En un acto institucional organizado por el Ayuntamiento, se ha honrado la memoria de Dolores Beyret Valero, Antonia López Álvarez, Mónica Martínez Marín, Jonathan Muñoz Garrido, Juan Alejandro Ortiz Marín y Manuel Ángel García López, las seis personas cuyas vidas truncó el paso de aquella DANA que devastó la localidad. Y se ha rendido homenaje a quienes, desde el primer minuto, trabajaron sin descanso dando lo mejor de sí, primero para salvar vidas y localizar a las víctimas; después, para reconstruir el pueblo y acompañar a las familias en el dolor.
La Diputación de Albacete, que estuvo en Letur desde el primer instante aquella jornada, ha participado en esta cita que ha tenido como escenario la Plaza Mayor del municipio, congregando a autoridades, familiares, vecinos y representantes de todos los cuerpos, entidades y colectivos que formaron parte del dispositivo de emergencia y recuperación.
El acto, bajo una constante lluvia y lleno de emoción y de símbolos, ha estado conducido por la presidenta de la Asociación de Periodistas de Albacete (APAB), Loli Ríos, y ha comenzado con la música del Real Conservatorio de Música y Danza de la Diputación de Albacete, interpretada por el dúo de flauta y violonchelo formado por María Elena Calonge y Jorge Real, madre e hijo, que han acompañado el homenaje. Música par unir la tristeza, el respeto y la esperanza de todo un pueblo.
Recuerdo, reconocimiento y gratitud
Tras un minuto de silencio en memoria de las víctimas, el Alcalde de Letur, Sergio Marín, ha entregado una mención a las familias, en representación de todo el municipio. Después, se han otorgado hasta 44 reconocimientos a los cuerpos, entidades, asociaciones y personas que participaron en las labores de emergencia, rescate, apoyo y reconstrucción.
Entre ellos, se ha reconocido la labor de la Diputación de Albacete, por el apoyo económico, técnico y humano prestado desde el primer momento. El presidente, Santi Cabañero, ha sido el encargado de recogerlo. Junto a él en el acto, el vicepresidente Fran Valera, que ha recogido, en nombre de los Servicios Técnicos Provinciales, el reconocimiento a las distintas áreas que trabajaron sobre el terreno en las semanas posteriores a la catástrofe. Y la diputada de Turismo, Raquel Ruiz.
El Servicio Especial de Prevención y Extinción de Incendios (SEPEI), reconocido por su intervención inmediata y su trabajo heroico en las labores de rescate, búsqueda y localización de las víctimas, ha estado representado por el suboficial Fernando Marco Molina, jefe de Área, y el sargento José Antonio Ruiz Parras, jefe del Parque Comarcal de Hellín y miembro de la Unidad de Rescate Acuático.
Además, el Servicio de Hidrogeología, reconocido por su esfuerzo en la reparación de la red de abastecimiento de agua y el apoyo técnico al Ayuntamiento, ha estado representado por su jefe, Fernando de la Cruz. El Servicio de Carreteras, reconocido por garantizar los accesos al casco antiguo y facilitar la entrada de maquinaria pesada para las labores de desescombro, ha estado representado por su jefe, Luis Enrique García. El Servicio de Proyectos y Planes Provinciales (Arquitectura), reconocido por la evaluación de emergencia de las edificaciones afectadas y la protección de los equipos de rescate, ha estado representado por su jefa, Beatriz López. Y el Servicio de Parque Móvil de la Diputación de Albacete, reconocido por su contribución en la limpieza, desescombro, suministro de agua y apoyo mecánico y logístico, ha estado representado por Rafa Baidez (jefe del Área Mecánica, Automoción y Mantenimiento) y por Juan Amado Soriano García (jefe del Área de Maquinaria, Obras Públicas y Servicio a Municipios).
Un homenaje a la unidad y a la colaboración
Igualmente, se ha reconocido a un amplio número de entidades, cuerpos y colectivos que participaron en el dispositivo de emergencia: el GOE ‘Valencia III’ del Ejército de Tierra, la Unidad Militar de Emergencias (UME), la Guardia Civil (Comandancia de Albacete, unidades de Hellín y Letur, SEPRONA y Servicio Cinológico de El Pardo), los bomberos del Ayuntamiento de Albacete, el SESCAM, los Agentes Medioambientales, Protección Civil, GEACAM, Cruz Roja, Cáritas Diocesana y Parroquial, la Mancomunidad de los Canales del Taibilla, AQUALIA, TRAGSA, los Ayuntamientos de Elche de la Sierra, Férez y Socovos, así como asociaciones, colegios y colectivos locales.
También se ha realizado una mención especial a Ángel López Álvarez, vecino de Letur que arriesgó su vida para salvar a otra persona durante la riada y que, pese a las graves circunstancias familiares, continuó colaborando en las tareas de búsqueda y limpieza. Su gesto fue reconocido con una gran ovación del público.
Símbolo de fortaleza, cooperación y esperanza
Reiterando el pésame a las familias y seres queridos y siempre teniendo muy presente el dolor de quienes conservan cicatrices invisibles de aquel día que no se borrarán nunca, los dirigentes provinciales se han sumado al reconocimiento más profundo a todos los servicios que actuaron, y a quienes siguen ayudando a levantar este pueblo con compromiso y vocación de servicio.
No en vano, como siempre que tiene ocasión recuerda Cabañero, aquella DANA dejó una herida profunda, pero también una enseñanza: que la solidaridad, la organización pública y la cercanía humana son el mejor escudo ante la adversidad.
Memoria como compromiso
La Diputación de Albacete mantiene plenamente activo su compromiso con Letur, colaborando con su Ayuntamiento en diversas cuestiones. Los y las profesionales de los distintos servicios —desde los bomberos del SEPEI hasta Hidrogeología, Arquitectura, Carreteras y Parque Móvil— cumplieron con su trabajo siendo ejemplo de profesionalidad, humanidad y cooperación institucional.
De alguna forma, cada cometido, cada gesto de apoyo, cada vida salvada y cada infraestructura mejorada son, y seguirán siendo, un homenaje a quienes ya no están. Porque, como se ha recordado en el acto, la memoria no se queda en el pasado: se convierte en compromiso con el futuro.