El preparador alcanzará así su 26º temporada consecutiva en un banquillo de fútbol profesional, hito que solo ostenta él y que deja a las claras su experiencia, profesionalidad y capacidad. Más de 800 partidos dirigidos para un entrenador que está entre los 20 técnicos con más victorias en el fútbol profesional español, con 250.
Alcaraz se hizo cargo de la plantilla albaceteña el 3 de febrero y desde entonces contribuyó en gran medida a que el equipo diera un salto cualitativo para, el pasado 20 de junio, sellar la permanencia en tierras gaditanas.
Y los datos así lo corroboran. El andaluz tomó las riendas en la jornada 27, con el Albacete en puestos de descenso, y logró el objetivo que se le encomendó: mantener al equipo en la categoría de plata de nuestro fútbol.
El Alba de Lucas Alcaraz solo ha perdido dos partidos completos, sin contar los 45 minutos de la segunda mitad que se tuvieron que disputar en Vallecas tras el confinamiento, en 16 jornadas, en las que sumó 24 puntos. El entrenador andaluz consiguió que el equipo tuviese una clara seña de identidad, dotándole de personalidad, confianza y arrojo para encarar los partidos, lo que hizo del Albacete Balompié un cuadro compacto y muy difícil de batir.
Un hecho que se dio desde el primer día y que se mantuvo incluso tras el parón por la emergencia sanitaria, de la que el Albacete volvió mentalizado. No en vano, el equipo blanco sumó 17 puntos en las once jornadas que se disputaron en la nueva normalidad. Preparación, ambición y conocimientos que seguirán ayudando a hacer crecer al Albacete en una nueva etapa para la que el entrenador andaluz es la persona idónea para el cargo, como afirma Mauro Pérez, director deportivo del Albacete Balompié. “Por su compromiso, humildad y experiencia consideramos que es el mejor para liderar un nuevo proyecto en los que se han de tener los valores que él mismo encarna”.