Pedro Sánchez ha comunicado esta decisión al Rey Felipe VI y a las fuerzas políticas, y por la tarde hablaba con los presidentes de las comunidades autónomas, a los que ha agradecido de antemano su trabajo y comprensión.
El jefe del Ejecutivo no ha descartado que se alcancen los 10.000 contagios y ha explicado que la declaración del estado de alarma "permite movilizar al máximo los recursos materiales para combatir el virus", pero ha insistido también en llamar a la responsabilidad individual para contenerlo.