La intervención, llevada a cabo por el cirujano jefe de la plaza de toros de Albacete, D. Pascual González Masegosa, se ha centrado en la colocación de tres drenajes y una limpieza más profunda y a mayor detalle, con el objetivo de reducir la probabilidad de una nueva infección.
La intención de Sergio Serrano es acortar lo máximo posible los plazos de recuperación para volver en el menos tiempo posible a los ruedos.