“El Gobierno social comunista está empeñado en sacar adelante la nueva Ley educativa antes de que finalice el año, sin duda porque es la contrapartida que ha tenido que pagar para que sus socios aprobasen los Presupuestos Generales del Estado. Por eso, es una ley que pasa el rodillo al sector docente y a los padres de alumnos, y a los propios alumnos. Es una ley ideologizada, que permite el avance sin esfuerzo ni mérito, que politiza el órgano de inspección de los docentes, y que quiere cercenar la autonomía de los centros”, explicó la parlamentaria albacetense.
Carmen Navarro advirtió que “esta ley educativa atenta contra la libertad de elección de los padres, atenta también contra el espíritu del artículo 27 de la CE y pone fin a la educación concertada, así como también pretende el cierre de los centros de Educación Especial”.
“El PP va a defender la libertad y el derecho de elección de los padres, que es un derecho constitucional, no un privilegio; por ello proponemos una resistencia cívica, legal y constitucional, pues tal y como ha anunciado el presidente nacional del PP, Pablo Casado, presentaremos recurso de inconstitucionalidad; asimismo, una resistencia legal a través de las competencias de las CC.AA para que puedan minimizar los efectos negativos de la Ley Celaá que quiere acabar con la vertebración de la Educación en España” añadió Carmen Navarro, quien destacó la iniciativa parlamentaria del presidente del PP-CLM, Paco Núñez, para que García-Page copie a Ayuso en Madrid y adelante en Castilla-La Mancha la matriculación en los colegios antes de que la Ley entre en vigor, para que los padres puedan elegir el centro educativo que quieren para sus hijos.
La diputada nacional apeló a esta resistencia cívica y constitucional frente a la reforma educativa del Gobierno social comunista y expresó su apoyo a la Plataforma Más Plurales en sus manifestaciones reivindicativas en la calle con el lema ‘Stop a la Ley Celaá’.
REFORMA DEL CGPJ Y LEY DE AUTANASIA
Por otro lado, Carmen Navarro lamentó la reforma del CGPJ y la aprobación de la Ley de Eutanasia como una muestra más de una forma de gobernar de espaldas a la sociedad y de los sectores implicados en cada una de las materias. Así, con respecto a la reforma del Consejo General del Poder Judicial, denunció que “se ha hecho sin escuchar a los jueces, y el PP siempre va a defender reforzar la independencia del Poder Judicial y para ello es necesario dejar fuera a Podemos”.
Con respecto a la eutanasia, la diputada nacional del PP fue tajante al mostrarse contraria a “una ley de muerte; el PP siempre ha apostado por los cuidados paliativos integrales, y la solución a estas carencias no es una ley de muerte, sólo aprobada en seis países del mundo. Queremos la atención integral del paciente, acompañado de los profesionales sanitarios, a los que una vez más el Gobierno socialista les ha dado la espalda”.
“Esta muerte no es equiparable a una muerte natural; el PP defiende la vida y los cuidados paliativos públicos, profesionales, personalizados, universales y con el consenso de los profesionales, por lo que nuestra postura es un no rotundo a una ley de muerte”, concluyó Carmen Navarro.
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